El Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (COPAC) quiere expresar su consternación tras la revelación por parte del fiscal de Marsella encargado de la investigación del trágico accidente de Germanwings de que pudo haber voluntariedad por parte del copiloto de destruir el avión. De igual forma quiere trasladar un mensaje de tranquilidad y recordar el compromiso de los pilotos con la seguridad de las operaciones aéreas y de los pasajeros, como máxima prioridad de su ejercicio profesional.
El COPAC confía en que la investigación del accidente se realice con el máximo rigor, teniendo en cuenta todos los factores que han podido contribuir a este trágico desenlace, sin descartar por el momento ningún elemento, ya que a pesar de las evidencias, es necesario mantener el principio de cautela.
Para el COPAC es fundamental que los nuevos escenarios y posibles amenazas que se dan en la aviación se identifiquen a través de la implementación en las compañías aéreas de sólidos Sistemas de Gestión de la Seguridad, que de manera preventiva detecten y corrijan cualquier riesgo, tanto en el ámbito operacional como organizacional, tecnológico y humano.
El COPAC recuerda que los pilotos ejercen una profesión de altísima responsabilidad de acuerdo a un código deontológico y unos criterios éticos. Si se confirman definitivamente los datos revelados hasta ahora, este trágico suceso demostraría que es necesario reforzar aún más todas las barreras de seguridad, desde la formación inicial de los pilotos, el acceso a la profesión y el ejercicio y entrenamiento durante su carrera.
Por último, el COPAC recuerda que para actuar preventivamente es imprescindible un compromiso real de las autoridades aeronáuticas con la seguridad, contando para ello con los recursos y expertos necesarios.